CAFÉ CON ORTOGRAFÍA
Me encanta tomar
marcilla
Pero tengo un
problemón
¿Cómo quitarle
el tapón?
Sin partirme la
mejilla.
Sin saber el tal
manejo
O el secreto del
abrirlo
Mi opinión ya
les dejo.
-Cuesta muy poco
decirlo-.
Les cuento lo
que pasó:
Un día de
Navidad.
Fue mi mujer,
invitó
A su gente a
merendar.
Todos dijimos
marcilla
Ya veréis nos va
a gustar
Con bollos y
mantequilla.
Mantel. Tazas y a brindar.
Pero. ¿Qué pasó,
señores?
Entre risas.
Forcejeos
“¡Dejadme a mí!”.
Y sudores
-Surgieron hasta
mareos-
Por fin, se
lanzó el enano
Despegó una
pegatina
Y la otra que
era la inquina.
Y dijo:¡Con una
mano!
El bote se quedó
abierto
Con un plato
puesto encima
Por si no
pudiera, y es cierto
Y se precise una
lima.
MORAL-DEJA
No es por hacer
propaganda
Y sí, lo que
Dios nos manda:
Conocer muy bien
el cierre.
Abrir el tarro.-Doble
erre-.
Y entre vocales
lo agarro.
