EL RUMOR DEL MAR DE CÁDIZ

EL RUMOR DEL MAR DE CÁDIZ

Por mucho que os empeñéis / dando y dando la tabarra

Con laudes  y guitarras.

Aquí, siempre me tenéis

Que soy yo, vuestro rumor.

El rumor del mar de Cádiz.

El airecillo del norte / que causa tantos estragos

No dejes que te recorte

Ni en estatura ni en pagos.

Ya está bien que se soporte

Estos y otros malos tragos.

El rumor de nuestras aguas / Apacibles, poco bravas,…

-¡Vamos a ver si ya acabas

Y lo dices de una vez!-

¿No las ves? van en enaguas

En inmensa placidez…

Agüitas que van y vienen / Recorriendo la bahía

Agüitas que siempre tienen

Esa sal, esa alegría

Que de siglos la mantienen

Escucha mi caracola / Y el misterio  que recoge

-¡Ahora va… y te dice ¡hola!

La oreja... ¿No se  te encoge?

Esta pizca de poeta / De guasón y sentimiento

¿Quién la fragua? Sino el viento

De levante.

                   ¡Qué majareta!

¿No ves? No hay quien te aguante.

Y aunque todo quede en casa /  El viento, el agua, el rumor,…

Y eso que tiene de guasa,…

Trova, trova, trovador.

Y las “tu musas” engrasa

Rumores que trae el viento / Rumores que lleva el mar.

Rumores de sentimiento

De olas y aves. Que al volar

Con tanto apasionamiento…

¿Quién va a desapasionar!

El rumorcillo va y viene.

Sube y baja.  Viene y  va.